No olvides el poder transformador de la naturaleza y que respalda la ciencia. Un estudio reciente publicado en el “Psychiatry Research” ha demostrado, con datos irrefutables, que pasar tiempo al aire libre reduce significativamente la ansiedad y la depresión, y aumenta la felicidad en la población general.

Este estudio no solo es exhaustivo, sino que utiliza evaluaciones constantes a través de una aplicación móvil, proporcionando una perspectiva precisa y en tiempo real de los beneficios mentales de estar en contacto con la naturaleza.

Aprendimos mucho de esto en la pandemia y sobre todo cómo nos afectó estar encerrados. A muchos se les olvidó ya la necesidad de clases y teletrabajo al aire libre. Te animo a que tú lo integres en tu vida diaria. Siempre he tratado de implementar políticas públicas que promuevan los espacios al aire libre porque entiendo su gran importancia para el bienestar mental. Creo firmemente que la salud tiene que ser transversal en todas las políticas. A otros esto les parece baladí y continúan como si la pandemia nunca hubiese ocurrido.

No esperes que quieran te estresa y va tarde a las ciencia y a las tendencias mire por ti. Comienza hoy dedicando al menos treinta minutos a explorar y disfrutar del mundo exterior. Pasea por un parque, disfruta de un momento de paz junto a un lago, fuente o río, o simplemente caminando por tu vecindario. Que la naturaleza forme parte tu vida puede ser revolucionario.

Merece la pena aprovechar la ciencia detrás de esta recomendación y transformar la rutina diaria en una fuente de salud y alegría. Anímate a dar ese primer paso hacia tomar las riendas de tu bienestar antes de que requiera pastillas. Conecta con la naturaleza, no solo es un santuario para el espíritu, sino una necesidad comprobada para una vida mentalmente saludable.