DETERMINA TUS HÁBITOS

Tan importante como donde nacemos es de quien o de quienes nos rodeamos durante nuestra vida.

Hay personas que siempre suman, animan y te hacen creer en ti mismo y otras que solo ven la parte quejosa y triste de cualquier evento que ocurra en ella y a pesar de no ser su intención, acaban con la poca esperanza que te queda para seguir.

Personas que son capaces de levantarse a pesar de todo y de todos sin rendirse, ni lamentarse y encima insuflarte ánimo. Otras que cualquier eventualidad les hace desfallecer y sentirse víctima, no solo de un mal momento sino de una racha implacable.

Ser de una u otra forma, de alguna manera es un hábito. Ya no recordamos cuándo decidimos ser así, qué experiencias vivimos o qué objetivos queríamos conseguir cuando creímos que esa estrategia sería la mejor y de repente nos convertimos en ello.

Todos los días es una nueva oportunidad para ser quien tú quieres ser. No será fácil aunque es posible. Piensa en esa persona con la que te gusta estar y en los rasgos que te gustan de su personalidad y conviértete en ella.

Entre quien eres hoy y quien puedes ser después de un tiempo cambiando de hábitos media determinación y entrenamiento. Todos queremos estar rodeados de gente inspiradora y positiva pero también podemos serlo.

DECISIONES EN TIEMPOS REVUELTOS

relax

 

A veces pensamos que la vida es lineal y que todo lo que nos ocurre, tiene lugar en capítulos sucesivos, independientes, que debemos ir resolviendo para luego dedicarnos a otros, como si pudiésemos abrir y cerrar cajas con los diferentes asuntos.

“A ver si acabamos con esto y…” es una frase de la que abusamos, impidiendo mentalmente que otra cosa pueda suceder mientras, como si eso fuese algún obstáculo para que la vida no siguiese su curso. Hacemos que toda nuestra energía esté preparada sólo y exclusivamente para ese evento. Tanta concentramos que, cualquier cuestión sobrevenida, que salga de nuestras expectativas, nos deja devastados, sin fuerzas…o enfadados e iracundos.

Ya sea el tratamiento de una enfermedad, la búsqueda de un empleo, la consecución de  un proyecto, incidentes que parecen superarnos,  todo ocurre a la vez que miles de cuestiones más a las que prestar atención, sin prisa pero sin pausa, puesto que la demora y la inacción también se convertirán en tus decisiones con consecuencias. No las dejes solas convertirse en lamentos.

Muchas de estas decisiones las tomamos en la más absoluta incertidumbre sobre cuál será el resultado y debemos ser conscientes de que las que tomamos, con esa complejidad, sin certezas, pueden paralizarnos y conducirnos a decisiones irracionales.

Los psicólogos, Amos Tversky y Eldar Shafir escribieron sobre el “principio de cosa-segura” y de cómo la mera incertidumbre afecta a nuestras decisiones, incluso cuando ésta no es indispensable para nuestro fin. Uno de los ejemplos que exponían en su estudio es el de alumnos que se enfrentan a un importante examen y a la vez a decidir si hacer un largo viaje después.  Del grupo a los que les dijeron que lo habían aprobado, un 57% decidieron hacer el viaje. De los que suspendieron, un 54% decidieron ir de todas formas. Sin embargo dentro del grupo que no conocían el resultado, un 61% pagaron una reserva para poder decidir después. ¿Qué conclusión puedes sacar  tú de estos datos?

Este ejemplo demuestra cómo, a pesar de que la vida pasa y sigue su curso, muchas de las decisiones que tomamos en momentos de incertidumbre pueden paralizarnos o hacer que nos perdamos muchas cosas.

Atribuyen a John Lennon esa frase que rara vez toma sentido para todo el mundo “ La vida es eso que pasa mientras tú haces otros planes”

¿Y si consiguieses seguir viviendo mientras tanto? Tú decides.

OBJETIVO 2017

img_0181

 

En cuanto empieza el nuevo año, en todas las revistas, periódicos y posts puedes leer sobre cómo prepararte para cumplir los objetivos que te has propuesto como inicio. Algunos de estos son tan comunes que tienen los pasos añadidos al propio artículo y están dentro de éstos, seguro: hacer ejercicio, perder peso, aprender un idioma, dejar de fumar…

Si reflexionáis un poco sobre ellos, tienen varias cosas en común:

• Crees que tienes el 100% del control sobre ellos, puesto que dependen casi siempre de ti, por lo que no conseguirlos, en muchos casos, te hace sentirte, una vez más, fracasado.
• Este fracaso hace que tu percepción de ti mismo sea cada vez peor, te veas y sientas más limitado y tu autoestima y confianza en ti mismo te sitúen en un nivel del que sea difícil salir para conseguir cualquier otra cuestión.
• Condicionan tu felicidad porque no dejas de pensar una y otra vez, a pesar de verlo casi imposible, que tu vida sería maravillosa cuando lo consiguieses, por lo que mientras tanto no serás capaz de disfrutar del proceso y se convertirá en un sueño inalcanzable que no potenciará que quieras conseguirlo.
• Sólo lo relacionas contigo, en ningún momento ninguno de estos objetivos pasa por considerar el entorno, salvo para evitarlo en el caso de que no sea favorable. Como si fuese tan fácil permanecer al margen de todo y tan satisfactorio centrarse en uno mismo.

Lo que casi nunca incluyen estos objetivos, es esto último, la preocupación por los demás, por el entorno, por colaborar, ayudar o compartir algo que no sólo mejore tu vida sino que sea un gratificante empujón en la de los demás.

Puedes decirme que cualquiera de los objetivos anteriores tiene que ver con tu entorno pero, ¿realmente lo tienes en cuenta cuando lo piensas?, ¿es ese tu motor?

El difícil propósito de darle a tu vida sentido es mucho más gravoso si lo circunscribes a ser el único beneficiario de tus objetivos. Somos seres sociales y el sentido de pertenencia o de utilidad tiene su máxima expresión en las relaciones humanas, que a veces dejamos en segundo plano, incluso pensamos que cuando nuestros objetivos-condiciones se cumplan todo será maravilloso. Mientras, todos los que están a nuestro alrededor y que permanecen como figurantes en nuestra vida difícilmente podrán creernos cuando esto ocurra.

No pierdas de vista a los demás en tus objetivos de 2017 y seguramente esta novedad supondrá una victoria gratificante sobre ti mismo que además podrás celebrar acompañado.

¿Qué pierdes por innovar en tus propósitos anuales?

¡A por el 2017 con ganas y juntos!

¿Te instalarías el dispositivo?

img_4830

Viendo ayer un capítulo de la serie «Black Mirror», que por cierto recomiendo para quienes les guste reflexionar sobre las futuras implicaciones que puede tener la tecnología en nuestras vidas en su versión más asfixiante, encontré una fabulosa metáfora para poder ahondar más en cómo nosotros hacemos funcionar nuestra mente.

La propuesta: cualquiera puede instalarse, con una pequeña incisión, un dispositivo tras la oreja, que cuenta con la capacidad suficiente para poder almacenar toda tu vida, con todas tus vivencias y recuerdos y, mediante un mando a distancia acceder a ver cualquiera en ese momento, reviviendo, cualquier episodio de tu vida.

Además, en esas vivencias, vas a recordar todo lo que has presenciado, oído y sentido y todo lo que hicieron o dijeron quienes estaban contigo en esa situación.

Contéstate con sinceridad y, si te haces más preguntas, añádelas al final por favor:

  • Imagínate que tuvieses la opción de implantártelo, ¿lo harías?
  • ¿A qué tipo de recuerdos accederías? ¿útiles o inútiles?
  • Sabiendo que puedes acceder a ellos pero no cambiar nada, ¿borrarías alguno?, ¿lo harías sin antes verlos de nuevo?, ¿ qué te haría volver a verlos?
  • ¿Para qué verías los que te hacen sufrir?, ¿aprender?, ¿castigarte?, ¿mejorar?, ¿usar la información?

Lejos de adelantarte qué ocurre en el capítulo sólo te dejaré el título «The entire story of you»

¡No te lo pierdas!

¿Piensas seguir en el sofá?

action

 

Cuántas veces vas en el coche conduciendo, sentado en el autobús, en el metro, estás repantigado en tu sofá y piensas en eso que tantas ganas tienes de hacer y que te va a cambiar la vida.

Piensas en ese viaje, en esa conversación, en esa acción que definitivamente te va a poner en una posición mucho más cercana a tu objetivo. Ideas como hacerlo, dónde ir, con quién , te ves incluso haciéndolo y de repente todo se desvanece y oscurece.

Empiezas a construir un muro alrededor de tu idea  y te ves fuera, cada vez es de mayor envergadura y te excusas con cualquier cuestión que antes ninguneabas.

Ahora definitivamente te importa que puedas fallar, lo que van a pensar los que nunca te han importado, lo que ocurrirá cuando fracases y atenazado por el miedo, renunciarás a cambiar tu vida a cumplir tu sueño, a lograr tu objetivo.

Sabiendo que nadie más puede hacerlo por ti, a veces deseas que los demás te lean la mente, te digan lo maravillosa que es tu idea y te animen sólo con ver tu cara de ensoñación o acaso ven la otra, la de estar atenazado por el miedo y se presa fácil de los “pinchaglobos” del mundo que por no atreverse ellos tampoco, disfrutan haciendo  proselitismo.

Las opiniones y las personas pasamos y nos desvanecemos, incluso alguien vuelve para colgarse la medalla de haber profetizado tu  éxito con las pegas que te puso. Lo que ya no van a volver son todos esos días que has perdido en tu vida para hacer  lo que realmente de va a hacer sentirte orgulloso de ti mismo. No sólo por haber vencido ese miedo y tener en tu haber una gran victoria sino porque entonces, podrás servir de modelo y animar a todos esos que permanecen sentados con el cinturón de seguridad ajustado.

Empieza por no hablar de tus sueños en condicional “yo haría”, “me gustaría” pásalo al presente con lo que estás haciendo  por alcanzarlo o al menos di “yo quiero”.

A continuación, no permanezcas sentado e inmóvil ni un segundo más, haz esa llamada, busca ayuda, pasa a la acción y poco a poco te sentirás cada vez más capaz de conseguir lo que te propongas.

No esperes ni un minuto más sentado.Uno, dos, tres y ¡ACCION!

A vista de águila

aguila

 

Si piensas en tu futuro, no eres capaz de encontrarlo, ni de imaginarlo. Las cuestiones prioritarias, urgentes y emergentes pueblan tu día a día impidiéndote ver el bosque. Si hace tiempo que te meces a merced de las olas, desorientado. Seguro que has dejado hace tiempo de soñar despierto, de imaginarte dónde quieres estar en unos años, quién quieres ser, cómo te quieres ver…

Te miras al espejo y no te reconoces, nunca pensaste en ser  esa persona que te observa desde el reflejo. Has cumplido expectativas de otros, estás viviendo lo que la sociedad te pide, lo que tus deudas requieren, lo que tu familia creyó que era lo mejor, saliste decidido de tu formación y a partir de ahí, todo han sido movimientos involuntarios, has seguido sólo la corriente.

Para qué esperar al final de tu vida para lamentos y pasados edulcorados. Cada minuto que pasa es un buen momento para empezar de nuevo. Nunca sabemos, tengamos la edad que tengamos, el tiempo que nos queda, pero sí sabemos que en cuanto pensamos en soñar nuestro gesto cambia, nuestra postura cambia  y nuestras oportunidades cambian.

Sólo nosotros con nuestra mente somos capaces de hacerlo, pero para eso lo primero es verlo.

Te imaginas qué podría cazar un águila en constante vuelo rasante, sin suficiente altura, sin  haber podido atisbar con su prodigiosa vista su sustento. ¿Cómo podría sobrevivir?

¿Sería entonces símbolo de majestad y victoria?, ¿le serviría acaso tener esa  increíble fuerza en su pico?

 Si en lugar de utilizar su captura en vuelo y en suelo, sólo utilizase esta última. Sin usar esa poderosa habilidad que es tener dos puntos focales de vista de  frente y de costado, ¿podría mostrar su poderío?

Si nuestro vuelo es constantemente bajo, nos encontraremos con multitud de obstáculos que con una visión diferente más amplia y distante, minimizaremos hasta producirnos risa y asombro, haberlos visto como insalvables.

Si nuestro vuelo sólo nos permite mirar hacia delante, a lo próximo y urgente, nos perderemos miles de matices y de oportunidades que están teniendo lugar más cerca de nosotros de lo que pensamos.

Si seguimos con este tipo de vuelo, llegará un momento en el que ya no sepamos o no creamos que podemos hacerlo mejor. Creeremos que la rutina y el dominio de unas cuantas habilidades que entrenamos durante años nos servirán para siempre,  mientras el mundo cambia y los demás crecen.

Visualizar nuestro sueños con el poder del águila, nos va a hacer claro dónde queremos llegar y cómo. Haciendo que todos los días consigamos hacer algo que nos acerque a ellos.

Empieza por hacer una lista de 25 cosas que quieres hacer en la vida antes de morir. No generalices, ni abras grandes bloques. Sé todo lo preciso y específico que serías si fuese un deseo que un gracioso genio te concediese.

No dejes esa lista muy lejos, intenta visualizarla y concretarla durante tiempo. La cotidianeidad de la vida pesa sobre nuestros hombros muy a menudo y nos impide elevarnos para tener presente nuestros sueños. Los olvidamos.

Si no haces el esfuerzo de ejercitar tu  vista de águila, acabarás por no ver más que lo tienes a pocos centímetros de ti.  

¿Vas a dejar de soñar? 😉

Opiniones navideñas

reunionesnavideñas

 

Se acercan las Navidades y las reuniones familiares. A veces no estamos acostumbrados  a compartir tanto tiempo con la familia y en otras ocasiones, son estas fechas las únicas que nos reunen, por lo tanto, de año en año vamos almacenando emociones de todo tipo asociadas a las personas que vemos tan poco, hasta hacerlas idénticas a las etiquetas que les hemos puesto desde  hace años, sin apenas cuestionarlas.

Una gran ayuda para combatir ese efecto es estar prevenido frente a estos mecanismos automáticos que hacen que, de una opinión inoportuna o desafortunada, pensemos que una persona es así o asá, sin darle una nueva  oportunidad.

Si por algo parece que reconocemos estas fechas es por el ambiente que promueven de generosidad y bondad, a pesar de que a más de uno les parezca caramelizar forzosamente unos días del año, ese espíritu puede ser el que nos ayude a mejorar nuestras relaciones familiares, algo que abundará en nuestra seguridad y confianza personal al poder extrapolarlo a nuestra vida cotidiana y laboral.

Recordar la diferencia que hay entre las observaciones y las opiniones, esto es lo que nos ayudará enormemente a no destruir nuestra felicidad, ni nuestra paz interior en estas fechas.

Las observaciones son hechos que se sostienen y comprueban por sí solos y se diferencian por esto de las opiniones que son juicios  que emitimos las personas, conforme a nuestra experiencia. A veces vertimos opiniones como si fuesen hechos irrefutables y esto produce un efecto decisivo en nuestro interlocutor, haciendo que empiece una discusión por cualquier frivolidad.

Seguro que con este simple ejemplo lo podemos entender, si yo digo “hace frío debemos subir la calefacción”, otro persona puede refutar esa opinión diciendo que “hay 23 grados, no puedes tener frío”. Esa simple introducción que parece inocua puede derivar en una conversación crucial que fastidie toda una noche al poder derivar en pensar que alguien quien imponer su criterio, en qué es lo que creemos que es cada uno, en qué gasta el dinero, en fin… en virtudes y  defectos que se convierten en una batalla campal, a cuenta de una simple opinión. Sin entender que el hecho es que “hace 23 grados” y a esa temperatura unos tienen frío y otros, calor, algo que depende  de múltiples variables, de si se está en movimiento, más o menos abrigado, alimentado…

Si conseguimos distinguir entre lo que es una opinión y lo que es observable podemos entender que lo primero es una cuestión exclusiva de la persona con su propia autoria, una interpretación personal que nada tiene que ver con nosotros o con querer ofendernos o molestarnos, es simplemente fruto de su análisis con los recursos que posea, que pueden ser más o  menos pero casi siempre distintos a los nuestros.

Muchas de estas opiniones que vertimos son automáticas y por lo tanto inconscientes, no nos damos ni cuenta de que entre nuestro público, hay personas a las que sin querer podamos aludir. Además lo escondemos con frases impersonales para no ser responsables de la opinión, no decimos “yo tengo frío” que sería lo correcto, sino «hace frío». Muchas de estas opiniones se convierten en juicios tóxicos. No añaden ni aportan nada, sólo molestan.

El no hacerlos, supone que pensamos antes de hablar. Reflexionar sobre si mostrar este tipo de opiniones merece la pena o quizá hacer este análisis previo, puede significar un aprendizaje definitivo en tu persona para saber opinar de forma productiva. Expresando «nuestra verdad», como una opción más, sin imposición y basándola en hechos que tampoco son definitivos para tener razón.

Además para que una opinión produzca un efecto en ti tienes que autorizar al emisor para que su evaluación te afecte. Ese es el momento  en el que va a hacer entrada tu espíritu navideño, encontrando mil razones por las que ese familiar tuyo ha hecho esa apreciación y por cuántas razones no te va a afectar, ni a tu humor,  ni a tu opinión sobre él. Si cambias tu actitud hacia él, cambiará la suya hacia ti.

Rompe el círculo tóxico. Diferénciate. Convierte tus Navidades en un gran aprendizaje.

Training day

correr

Llevas demasiado tiempo haciendo lo que los demás esperan de ti. Te miras en el espejo y lo que ves no te gusta, a  pesar de que tu vida a los ojos de cualquier otro sería una vida perfecta.

Nunca has tenido el valor de preguntarte: ¿qué es lo que realmente quiero hacer con mi vida?

Has renunciado a los sueños que tenías, a llevar a cabo con pasión todo lo que realmente deseas para adaptarte a un mundo que no te gusta. Has pensado en cambiarlo y sin salir de tu mente, te has rendido.

Quieres  tomar el poder, empezar a trabajar en lo que realmente te apasiona, quizá te parezca una locura, ahora mismo los límites se multiplican en tu cabeza y quizá una sensación de vértigo te atenaza y acelera la respiración.

No has podido encontrar a personas que están en el siguiente nivel, que  han conseguido pasar por encima de  todos esos miedos y obstáculos que juegan en tu contra justo cuando tus planes se magnifican y  se convierten en tu motor.

¡Hacer algo fabuloso con la vida es una cuestión que está al alcance de todos!, aunque no cualquiera consigue que esta misión sea una obsesión y no deje de avanzar hacia ella.

Para conseguir estos objetivos se necesita, como mínimo, ser perseverante y para esto tener disciplina.

Si estás decidió a ser quien buscas en el espejo y quieres empezar a trabajar en ello, te dejo una interesante práctica de Robin Sharma: “The daily five, the nightly three”.

 Cuando te despiertes por la mañana piensa en cinco cosas que vayas a hacer durante el día, que hagan de éste, un día diferente, valioso y que te acerquen a tu objetivo. No intentes que sean metas inabarcables o muy costosas que te hagan renunciar a llevarlas a cabo. Divide tu objetivo en pequeñas tareas y hazte el firme propósito de ponerlas en marcha.

Piensa en que te van a convertir en un hombre o una mujer de acción, que te van a llevar  a un nivel diferente en el que ya no van a ser deseos o intenciones sino que son actividades específicas y medibles encaminadas a un objetivo mayor.

Por la noche antes de acostarte, aunque tu día haya sido duro, encuentra tres cosas que hayas llevado a cabo y puedas celebrar, apúntalas en tu diario de a bordo, libera dopamina y ¡siéntete fuerte!

Imagina, al cabo de un mes, y de ¡un año! cuántos días valiosos habrás vivido y en la recompensa que significará haber realizado y agradecido todas esas  acciones que te han puesto en tu camino hacia el objetivo.

¡Es tu vida!, no querrás mirar hacia atrás dentro de muchos años y ver que te rendiste antes de empezar, ¿no?

 Foto:foroatletismo

Salirse del guión

rigidez

Reflexionando sobre el planteamiento de objetivos, pensé en que cualquiera de los dos post anteriores podía sugerir bondades de una característica, que lejos de ayudarnos en nuestro desarrollo, nos perjudica, la rigidez.

 Cuando planteamos unos objetivos, el simple hecho de establecerlos, de tener una estrategia, nos motiva y nos pone de buen humor.

Escribirlos y visualizarlos es parte del trabajo, sin embargo revisarlos, como mínimo semanalmente, se convierte en  lo fundamental. Esto nos hace que sigamos teniendo la ilusión y la motivación del primer día y que tengamos en cuenta el dinamismo y los cambios continuos de la vida.

 Cada día nos sorprende una noticia nueva para la que no estaban preparados nuestros objetivos. ¿Quiere decir eso que hemos dado al traste con nuestros planes?, ¿Qué nuestra lista de objetivos ya no sirve?

Tomar decisiones a diario con nuevos datos se ha convertido en una necesidad actual y por lo tanto es algo que tenemos que integrar en nuestras dinámicas de “planificación”, que acabarán siendo “planes de previsión”.

 La seguridad sólo depende de nosotros mismos, de nuestro interior, todo lo demás puede cambiar de un momento a otro. La lista de objetivos es sólo una herramienta en nuestra estrategia de cara a la felicidad, que ciertamente ayuda.

¿Habremos fracasado si no se cumplen? Si tenemos en cuenta que esta afirmación proviene de no salir las cosas como estaba establecido, puede, pero significa esto que no habremos dado con otra solución a otra cuestión, que  no habremos aprendido otra forma, como decía Edison, de no hacerlo para conseguir determinados resultados. Definitivamente, no fracasamos.

¿Salirse del guión, está penalizado? Por supuesto que no, es más, está recomendado por la neurociencia aumentar nuestras conexiones sinápticas haciendo cosas que nunca hemos hecho, aprendiendo, probando, además la creatividad parte de estas incursiones en lo desconocido, en la mezcla, en salirse de la rutina.

Ponte en la situación de que el plan de crecimiento laboral que tienes previsto desarrollar en una empresa se reduce a tu país. Qué ocurriría si te ofreciesen una oportunidad en otro lugar. Seguramente los miedos a salirte del plan, te impedirían tomar una decisión que te reportaría beneficios a futuro.

La rigidez es la base de los prejuicios, de la infelicidad, de la resistencia ante la curiosidad y supone la falta de innovación y de creatividad.

Usa tus planes como un guión actualizable. No permitas que la rigidez apague tu ilusión, ni tus oportunidades.

Ser espontáneo también tiene su premio.

foto:descargarobinhood

Piensa en grande

dream

Desde  que emprender es la  opción que parece impregnar el ambiente, los términos empresariales inundan todo. Escuelas de negocios anuncian sus nuevos programas ad hoc, lo que te falta, lo que te piden, lo que hay que hacer con las ideas, lo que no, socios, fracasos, etc…

Una de las primeras advertencias que recibimos es la temeridad de llevar a cabo una idea de negocio  sin un Plan, sin sondear lo que ofrece el mercado, tus competidores, si existe nicho de mercado, cuál va a ser tu público objetivo…

Cursos y más cursos sobre si es mejor ser autónomo, constituir una Sociedad Anónima, Limitada, Cooperativa, miles y miles de horas pensando en cómo desarrollar tu idea. Pero …y tu vida?

Tu vida tiene plan, tienes metas, objetivos, sabes dónde vas, cuánto tiempo tienes calculado que te va a llevar ir donde quieres, con qué recursos cuentas, si quieres o no socios y para qué….

Lo más importante, adónde vas a pasar el resto de tu vida, si no tienes Plan…donde los demás te lleven, dando tumbos, te rendirás a lo que llaman “destino”…

Yo que tú, de aquí al domingo, allá donde quiera que fuese, llevaría un papel conmigo, o en el móvil  escrito o  grabado, como  prefieras y me haría un “ Plan de Vida”.

Empieza por pensar dónde quieres estar el año que viene este día, el 30 de Abril, qué quieres haber conseguido, haz una lista de recursos y piensa en cómo los vas a obtener, pon fechas concretas, sal de tu zona de confort! arriesga! sueña! Piensa en grande, como si el fracaso no existiera y fueses capaz de llevar a cabo eso que te apasiona, si límites, ponle los cinco sentidos, olores, sabores, tacto, vista y oído. Cómo será ese lugar, qué harás, qué verás,con quién estarás hablando, no escatimes ,si tiene que ser con Mark Zuckerberg, siéntate junto a él y háblale de tu proyecto.

Cuando acabes con 2014, piensa en “tu empresa”, tú mismo, en cinco años y repite la misma operación, con pelos y señales, tal vez ahora con más tiempo, te veas más lejos, más cerca de tu objetivo, piensa en quién te rodea, qué cualidades tienen, dónde estás ponle colores y sonidos atractivos, qué ves desde tu despacho, con quién vas a comer….

Y ahora  en 15 años !!! En 2028, éste es tu Plan más ambicioso, aquí seguramente ya has conseguido tu objetivo, pero no puedes dejar de crecer, por lo tanto visualízate, consiguiendo  logros  que  otros nunca imaginaron que consiguieses pero en los que tú siempre confiaste porque tenías un Plan. Tómate tu tiempo  para completarlo, lo que ahora son sueños, a partir del lunes, será tu hoja de ruta.

Walt Disney, de quién en su  comienzos dijeron que no tenía imaginación suficiente!! dijo : “Si puedes soñarlo, puedes lograrlo”. Recuerda que todo empezó con un ratón!! 😉

Foto: behance.net